Vivimos en un mundo donde existen muchos mundos

Me di cuenta que hace tiempo mi vida transcurre siempre en movimiento moviéndome de transporte en transporte, aviones, buses, bicis, metros, barcos y trenes, y estos últimos especialmente son los que me encantan.
Es como disfrutar del viaje en cámara lenta, te da tiempo para absorber todo lo que pasa por delante de una manera diferente.

Cuando apareció la oportunidad de subirme a uno para atravesar 3 países y dos continentes, me anote sin lugar a dudas.

En el medio pasaron muchas cosas y no quiero dejar de contar las miles de anécdotas que vivimos, xq como todos saben en esta vida viajera un día vale por mil y es mucho mas intenso de lo normal.

Nos enamoramos de Rusia y nos quedamos mucho mas tiempo del que esperábamos, nos dimos cuenta que pueden parecer fríos por fuera pero son muy cálidos por dentro
Hicimos de un pueblito nuestro hogar indeterminado solo porque nos gustaba pronunciar su nombre.
Rancheamos en cada lugar que encontrábamos confortable para tomarnos unos mates, inclusive pleno Siberia.
Caminamos sobre el agua del lago mas profundo del mundo.
Nos tiramos por un tobogán de hielo.
Nos mezclamos de energías chamanicas
Aprendimos que se puede convivir en paz teniendo muchas religiones al mismo tiempo, siempre que se pueda respetar al otro.

Aprendimos que el Ingles no es una gran skill en algunos lados.
Que los turistas extranjeros no somos tan importantes para algunas economías.
Y Nos enteramos que nuestro idioma suena como si estuviéramos cantando.

Comimos pure y cous cous por días.
Pero tambien nos convidaron pikles y mermelada casera, y probamos la verdadera ensalada rusa.
Nos hicimos fanas del Chai y de las tacitas del tren, aunque no podemos decir lo mismo del pan y las sopitas instantaneas.

Recorrimos mil Iglesias hermosas, con cúpulas doradas y de colores cuasi circenses.
A través de ellas descubrimos la historia y los resto del Zar y su familia.

Hicimos muchos planes y nos los olvidamos!!
Planeamos muchas cosas y las cambiamos.
Visitamos la misma ciudad dos veces solo porque queríamos un foto con el atardecer.
Fuimos entrevistadas para la television chilena por ser unas viajeras intrépidas en una callecita de tierra de la Isla desolada de Olkhol.

Descubrimos que Rusos y Mongoles comparten la pasión por los Beatles.

Nos morimos de frío, aveces.
fotografiamos mil ventanas de colores.
Y muchos hitos insólitos como por ejemplo el monumento al rallador, porque  sin el como comeríamos las pastas con queso.

Por supuesto perdimos un tren, aunque habíamos llegado  antes a la estación y los esperamos en el anden incorrecto por horas... y lo corrimos con ilusiones de que frenara por nosotras.
Rusia fue una montaña Rusa de emociones, pero de esas que al final del día aunque no estés sin aliento las volverías a repetir.

Un mes después de tomarnos el primer tren y subirnos a esa aventura desconocida que implicaba convivir con personas random, que no hablan tu idioma y compartir todo, cuarto, baño, desayunos meriendas y almuerzos, juegos de cartas y dibujos o lenguajes de señas, sonrisas y caras de cansados.

Hicimos un stop breve en Mongolia, una estepa enorme de paisajes variados, mesetas,montañas y explanadas, con gente muy orgullosa de su cultura, y aunque no te sonríen por la calle, cuando los conoces interactúando  en su circulo de confianza son extremadamente alegres
Y quien no lo seria con la cantidad de azúcar que consumen y las grasas animales en todas sus formas, se le explotan los cachetes de felicidad.
Definitivamente no un país apto para Vegies y menos para veganos.

Aunque en algunas cosas son super originales, tienen unas casitas de campo con un estilo especial (Ghers) toman su Te salado, hacen unas botas de cuero estilo duende hermosisimas y son Crack en el manejo de la lana de oveja, haciendo un "material" incomparable por su diseño y su cualidad impermeables, y bueno es que cuando llega el invierno duro en Mongolia, se les congelan hasta las pestañas, literal!

Eso si para nosotras fueron personas con poco sentido común, pero bueno que tiene de común el sentido, si en definitiva todo venimos de una cultura diferente y lo que es común para algunos, no lo es para otros.

En fin! Llegamos a Pekin, Bejing!
Ultima destinación, acá se acabo el transmongoliano, pero empezó todo un mundo nuevo, acá cruzamos a China!

Un país tan grande, tiene que tener muchas cosas lindas para conocer, y en eso estamos descubriendo esa magia china que es lo único que no podes conseguir en el super chino del barrio o en el todoxdos!

Y obviamente nuestro itinerario oficial paso de 1 semana a 20 dias y de una punta a la otra, por que claro como vamos a dejar de conocer el East, donde esta mas calentito, se siente verano, y podemos andar despreocupadas con una bici que nos lleve a todos lados.
Así que aca estamos con una china en China!
Sobrepasando el smog y los hormigueros de gente concentrada, los empujones en las multitudes chinas, acostumbrándonos al pollo envasado, a la falta del respeto por el espacio personal, a los gritos nasales y al quererte vender todo lo que pueden a Tuenti aunque no sepan que te están vendiendo.
Pero felices, porque quien diría que llegaríamos tan lejos!

Después de escalar 5 horas una montaña para llegar a la parte secreta de la wall y casi perder la vida en el intento
escribo este post tomando unos mates sentada en la muralla y pensando que no podemos dejar que el mundo nos ponga ninguna barrera

"Tenemos que aprender por nosotros mismos y después enseñarle a los desesperados que en realidad no importa que no esperemos nada de la vida, sino si la vida espera algo de nosotros"

La mente busca alimento incesantemente y no solo para el pensamiento, sino también para su personalidad y para su sentido del yo.
Sigamos formándonos de pedacitos de cada lugar, en definitiva, vivimos en un mundo donde existen muchos mundos